Compañeros y compañeras, la prohibición de varios de los más elementales derechos, a las y los seres humanos, ha sido una de las estrategias del sistema capitalista para extender aún más la brecha social de clase, entonces unos pocos tienen acceso indefinido a lo que plazcan, mientras que las clases más empobrecidas, por las sucias artimañas burguesas, encuentran muchos limitantes casi siempre económicos o en beneficio de la acumulación del capital.
Cuando en 1937 se decidió prohibir el cannabis, en Estados Unidos, fue por beneficio económico de un trió, Aslinger, DuPont y Hearst, quienes en esos años ostentaban grandes poderes mediáticos, científicos y económicos, las patentes de las exploraciones petrolíferas, del nylon, así como la imposibilidad de estos sujetos para monopolizar la producción artesanal de fibra de cáñamo y derivados medicinales del mismo, hicieron que no se de marcha atrás en destrozar las culturas de los pueblos, sus formas de producción y sostenimiento y las herencias de miles de años relacionadas a esta excepcional planta.
Ahora bien, es tiempo de cuestionar nuestra pasividad y de cuestionar al sistema capitalista por su gigantesca agresividad contra los pueblos y culturas, la investigación es un gran paso, pues con ella dejaremos atrás la ignorancia en la cual nos han sumido, luego es importante tomar acciones, alzar la voz, reclamar lo justamente nuestro y luchar en beneficio de la clase.
Este es un llamado a no prejuzgar, a no admitir las mentiras mediáticas, a unirnos, a rechazar la división en la que han hecho tropezar a nuestra clase trabajadora, a difundir la información para vernos fortalecidos en la teoría, pero ante todo a retomar lo que es nuestro sin pactar, sin vendernos.
Desde la clandestinidad "María" también ha gritado por su libertad, y ¿qué hemos hecho nosotros? No podemos enmascarar con juicios de valor a parte de la naturaleza, sino como decía Ernesto Guevara, estudiar mucho para poder dominar la técnica que permite dominar la naturaleza.
Salud compañeros trabajadores en su día, salud también hermanos campecinos, salud amigos estudiantes, todos unidos, todos fuertes.
¡La prohibición es un crimen!